Humanidades

Hoy he tenido que soportar una vez más que se cuestione la utilidad de lo que he estudiado, algo "de letras", menospreciándolo frente a "las ciencias". Nunca antes a lo largo de la historia, esas "letras", las Humanidades, han estado tan disociadas de los estudios científicos y tan sumamente infravaloradas frente a éstos. Antes se abogaba por un conocimiento más global e interdisciplinario, en el que unas materias y otras iban de la mano. Hoy en día estas enseñanzas de Humanidades prácticamente han desaparecido de la educación obligatoria y el Bachillerato, y en las Universidades el número de matriculados en estas disciplinas es cada vez menor. En esta sociedad en la que impera la tecnología, se desprecian totalmente las ciencias humanas, por considerar que no apartan nada al progreso.

Sin embargo, el verdadero problema es que no se sabe ver su utilidad. En un mundo totalmente maquinizado, mecanizado y digitalizado, las Humanidades son más necesarias que nunca. Son esas enseñanzas las que estudian al hombre y su condición humana. Sus reacciones frente a la vida y la muerte, el amor y el odio, el poder y la injusticia, el dolor y la felicidad; en definitiva, todo lo que nos empuja a averiguar el sentido de la existencia y nuestro paso por el mundo. Esos testigos de nuestro tiempo, la relación que tenemos con lo que nos rodea, nuestro comportamiento, nuestros pensamientos, es lo que estudian la filosofía, la geografía, la historia, el arte, el derecho o la literatura... ¿Es acaso todo esto poco relevante?

No, no lo es aunque algunos así lo piensen. El conocimiento y la cultura hacen al hombre humano y sabio, y es ese hombre el que se percata de su ignorancia sobre sí mismo y su alrededor, y por ello es capaz de progresar y evolucionar. Es un hombre que lucha por conocerse con sus virtudes y fallos, aprende (o al menos lo intenta) de sus errores, comprende sentimientos y sabe como expresarlos, se comunica, está dotado de un sentido crítico y es capaz de emitir opiniones propias y defenderlas... Un hombre cultivado es más respetuoso para con los demás y con lo que le rodea; es más humano en definitiva. El conocimiento no es en balde, sino que eleva nuestra condición libre, creadora y racional.

Estoy más que harta de que no se valoren en absoluto "las letras", dando por supuesto que son estudios más simples y mucho menos importantes que una Ingeniería, Arquitectura o Economía. Se da por hecho que estudiar una disciplina de Humanidades es algo sencillo y al alcance de todos "sólo hay que echar horas y memorizar", cuando para nada es así. Hay que tener capacidad de comprensión de conceptos, diferenciar las ideas, ser capaz de interrelacionarlas, ahondar en las cuestiones, tener sentido crítico y ser capaz de situarte cronológicamente y geográficamente. Estas entre muchas otras aptitudes... No se trata sólo de repetir las cosas como un papagayo y escupirlas después, porque, al igual que sucede con las Ciencias, cuando estudias Humanidades también te adentras en un terreno muy vasto que es imposible abarcar por completo.

Me parece inconcebible que en una época en la que se trata de proporcionar saber a todos y lograr que la cultura esté al alcance de todo el mundo a través de becas, programas en la televisión, publicaciones masivas de libros, museos, conciertos, bibliotecas públicas y espectáculos teatrales (entre muchas otras cosas), aún sigamos con esta dicotomía entre "ciencias" y "letras". Ambas ramas del conocimiento son fundamentales para el desarrollo humano, y por ende, merecen el mismo respeto.